Prólogo

Las gotas de lluvia caen sobre la ventanilla del coche...ploc, ploc, ploc... una tras otra. Mi hermano se despereza a mi lado, no se cómo es capaz de dormir, con la que se nos viene encima... pero supongo que estará tranquilo porque siempre nos salimos con la nuestra, al final todo acaba bien. Aunque si esto es acabar bien, a veces me gustaria acabar mal, siempre y cuando tuvieramos que dejar de huir. Es insoportable...

El coche se para, mi nuevo hogar... otra vez. Odio repetir esa frase tantas veces. A veces desearia ser completamente normal.

- Vamos Kaeli, nuestra nueva casa nos espera- Me apremia mi padre.
- Ya vaa... ¿tengo que deshacer las maletas o nos vamos pronto?- Ironicé yo.
- Pequeña, esto no es facil para ninguno, no lo hagas completamente insoportable ¿vale? pon un poco de tu parte.
- Vale, lo siento papa, estoy un poco cansada, nada mas.
- Bien, pues vamos

Entro por la puerta... aqui empieza mi nueva vida, por enesima vez.